jueves, 28 de febrero de 2013

Un nostálgico prematuro

Dar el salto a las cámara sin espejo para mi ha significado una huída hacia delante.

Os contaré mi historia en el mundo de la fotografía para que entendais bien lo que siento ahora.

Desde pequeño siempre he mostrado afición por la fotografía, era algo nuevo para mi, un mundo que me imponía respeto y no sé a día de hoy muy bien porqué. Como muchos, mi primera cámara de fotos fue una que me regalaron por mi primera comunión. No recuerdo que marca era, pero sí que tenía una connotación muy especial, no tenía carrete. El hecho de guiñar un ojo y acercarme con el otro hacia el visor para mi era suficiente. Dar dos vueltas a la rosca y hacer saltar el obturador era un sonido delicioso.

Desde ese punto hasta hace cinco años no pasó nada. Simplemente el hecho de llevar unos años trabajando me hizo volver a despertar el interés por la fotografía. Y me dije a mi mismo, voy a comprar una cámara reflex, que siempre quise tener una cámara de ese tipo.

Tampoco sé muy bien porqué, el mundo de la fotografía no lo puedo explicar con palabras con sentido, se me planteó una dicotomía nada más acercarme a la tienda. Y yo de que soy, ¿de Canon o de Nikon?

De Canon, por supuesto, aunque tampoco sé muy bien porqué. Quizás sea como la afición por un equipo de fútbol sin condicionarse por los padres.

Podría seguir contando mil batallas de como fui y sigo aprendiendo la técnica de la fotografía y de como la gente de un foro llamado www.canonistas.com me ayudó a ir despertando un interés cada vez mayor por este mundo.

Mira que he pasado horas delante de esa página... Mercadeando, comprando cosas nuevas, cambiándolas por otras.

Y ahora que me cambié a Sony con la línea NEX hecho de menos volver a guiñar el ojo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario